Lacuna Coil lo volvió a hacer y como un verdadero manicomio del circo de los horrores, la banda encabezada por la bella Cristina Scabbia, ofrecieron un espectacular concierto en el Pabellón Cuervo del Palacio de los Deportes, el pasado 17 de marzo.
El día llegó y desde temprana hora arribó el primer fanático, pasando los estragos del clima, del frío al calor, el cansancio y hambre, pero estar ahí, frente a su banda favorita, tenía más importancia. Algunos, veintitrés para ser exactos, fueron afortunados al ganar un
meet & greet, que se realizó a través de diversas dinámicas.
Al abrirse las puertas, los cientos de fanáticos que se encontraban en el lugar, corrieron para logran un buen lugar, hasta adelante. La convivencia se realizaría minutos antes del concierto, la espera fue de poca paciencia para aquellos que estarían aún más cerca del grupo integrado también por Andrea Ferro, en la voz; Diego Cavallotti, guitarrista; Marco Coti, al bajo y el baterista Ryan Folden.
La banda, previo a su concierto firmó artículos y se fotografió con los ganadores del concurso, quienes expresaron su respeto y amor hacia ellos.
Como acto preliminar, Morante, banda que con más de quince años en la escena se ha colocado entre las favoritas del género obscuro y esta noche no pasó desapercibida, a pesar de que su actuación sería algo corta (35 minutos) ofreció un set de cinco canciones, mismas que fueron aplaudidas por todos los presentes, quienes ya estaban instalados para ovacionarlos y esperar, por supuesto, el turno de los italianos.
Los mexicanos salieron a brindar estas canciones, basadas en tres lustros de carrera y donde una gran parte del público les aplaudió y algunos también corearon. La banda está conformada por Sofi Lara, en la voz; Toño Chávez, en la guitarra y coros; Daniela Machorro, baterista; Raziel Iqui Balam, al bajo y Óscar Maciel, en los teclados.
La banda se mostró muy bien cimentada y dejaron el escenario listo para los estelares.
Setlist: Prisión, Memoria de un Suicida, Nocturno Deseo, Cada Noche, Alucinaciones
Ahora sí, llegó el momento inolvidable, el de apreciar el concierto de la gira Delirium, su más reciente álbum, abriendo “Ultima Ratio”, siguiendo inmediatamente con “Spellbound”.
En ese instante los llamados
coilers (seguidores) estaban ya extasiados y apenas comenzaba esta gran fiesta de locura. Cristina Adriana habló y expresó su agradecimiento a los mexicanos, indicando que los extrañaban y estaban listos para rockear esta noche.
La banda salió ataviada con una nueva imagen, literalmente de locura, como recién salidos del manicomio de los horrores, mientras ella lucía un atuendo blanco de ropa rasgada y sucia, además de un rasguño en el rostro, sus compañeros también lucían como internos de un hospital psiquiátrico. Andrea con una camisa de fuerza; mientras que Marco, lucía la cabeza rapada simulando sangre en la mollera y con un texto muy ad hoc, “Viva Mexico Cabrones”. Por su parte, Ryan mostraba un rostro cadavérico y su gran entusiasmo por estar tocando en este país. Digo mostró una herida de bala en la parte frontal.
Uno tras otro, los temas eran aplaudidos, coreados y vitoreados por los fans. Llegó un instante de sorpresas cuando intepretaron el tema “My Demons”, solicitada por sus fans a través de las redes sociales y los complacieron; así mismo un tema legendario “Senzafine” y el tributo a Depeche Mode con “Enjoy The Silence”.
El concierto siguió su curso duranet casi dos horas y dejando a poco más de un millar de personas satisfechas y el agradecimiento de la banda con su fiel público.
Setlist: Ultima Ratio, Spellbound, Die & Rise, Kill The Light, Blood – Tears – Dust, Victims, A Ghost In The Myst, My Demons, Trip of Darkness, Senzafine, Swamped, Downfall, Our Truth, Enjoy The Silence, Nothing Stands In Our Way
Encore: Delirium, Heaven’s a Lie, The House of Shame