Un concierto que se llenó de magia, luz y belleza. La noche del viernes fue muy grato para recibir nuevamente a la holandes Anneke van Giersbergen y las finlandesas Indica. La mezcla de culturas fue el principal y emotivo fin para pasar una velada cubierta con dulces melodías.
Por Isaac RINCÓN
Fotos Cortesía de Dilemma
Como grupo abridor, las finlandesas de Indica. El evento, en punto de la hora señalada comienza con “Islands of Light”, sintetizadores con efecto de violín, seguido de la dulce voz de la pelirroja mejor conocida como Jonsu, un tema muy bien hecho e ideal para iniciar este concierto. Siguieron con “Precious Dark”, también de su primer disco en inglés A Way Away; con esto, el público, que era poco hasta ese momento, comenzó a cambiar su ánimo que era un tanto de aburrición.
La cantante saludó al público con algunas palabras en español; éste le respondió con una gran sonrisa, felices estaban cuando comenzaron las primeras notas de “In Passing”, el tercer tema de la noche y con la cual sus fans corearon y algunos más, con el detalle de que a la bajista Heini se le zafó el tahalí de su instrumento y ella, risueña como siempre contagió al público y a sus compañeras y con este detalles se ganó a los mexicanos. A partir de entonces, su actuación comenzó a tomar más forma.
La canción más pop de la noche se escuchó entonces, “Nursery Crimes”, con un solo de guitarra muy meloso e intenso por parte de Emppu Suhonen, integrante del grupo Alavala, quien las acompañó en este viaje a México. En “Outside In”, Jonsu toma el violín y deleita al respetable con sus bellas notas.
Piedra Papel y Tijeras, un tema muy fresco y presto para hacer bailar a cualquiera y así fue, las chicas entres el público tomaron la iniciativa y comenzó la fiesta con “Scissors, Paper, Rock” y al término de ésta, “Mountain Made of Stone”; una canción que inicia particularmente con una ATMósfera muy particular, invitando obligadamente a imaginar el país de las chicas, Finlandia.
En este momento, el respetable estaba más animado y emocionado, aún se notaba un tanto vacío el lugar, quizá con quinientas personas, sin embargo todo siguió su rumbo natural y no perdió candor. El audio se mostró impecable y limpio, no era para menos, las chicas son unos verdaderos músicos en toda la extensión de la palabra.
El público ya más emocionado, aunque poco todavía en cantidad en el recinto. Hay que mencionar la calidad del audio, que fue excelente y con mucha claridad. Las chicas son unos verdaderos músicos en toda la extensión de la palabra y lo vinieron a demostrar esta noche de viernes.
Siguieron con “Missing” y los espectadores con las palmas arriba, la base rítmica de la batería de excelencia y los coros del público a todo. Un tema escrito con una maestría que hasta parecería hecho por el talentoso grupo sueco ABBA.
La peculiar “Goodbye to Berlin”, luego “Liljia’s Lament”, acompañada por las voces de sus seguidores, los agudos de su cantante, sin palabras. Después de un rato de nostalgia a prenderse con “Straight and Arrow”, donde nuevamente Heini sorprendió con las cuatro cuerdas bien dominadas y el punch de la señorita batería, Laura Johanna.
Todo lo que empieza tiene que terminar y el set de las finesas llegó a su límite para dejar el escenario a la holandesa y estelar de la noche, Anneke van Giersbergen, pero no sin antes agradecer una vez más la presencia de sus seguidores y otorgarles un éxito extra; una versión muy a su estilo del tema setentero “Wuthering Heights”, de Kate Bush, donde nuevamente Jonsu logra rematar y alcanzar las cuatro octavas con su encantadora voz. Una noche de bellezas con mucho talento, donde la que más acaparó la atención y no fue mencionada sería la tecladista Sirkku.
Indica son un grupo con una carrera en ascenso. Esta noche vinieron como teloneras a nuestro país, sin embargo merecen un lugar propio en la escena y un concierto donde el público sea exclusivo para ellas.
Luego de unos minutos de espera, la cautivadora voz de Anneke van Giersbergen se escuchó por primera vez en este recinto relativamente nuevo, el Plaza Condesa. “I Feel Alive”, la primera canción de su más reciente material discográfico; buen inicio para este concierto, tanto así, que el público se quedó boquiabierto y en poco tiempo, entonaron junto con la holandesa. El siguiente tema sería “My Boy”, muy suave melodía pero al gusto de sus fans.
La preciosa Anneke toma la guitarra y regala las bellas notas de “Beautiful One”, mismo que al unísono es coreado por la audiencia. El momento era mágico para interpretar entonces “You Want to be Free” y “Circles”. Posteriormente, el grupo hace un retroceso en tiempo a la década de los ochenta y deleita al respetable con el cover de los británicos Eurythmics, “Here Comes the Rain”. Se podía escuchar que los asistentes de más edad estaban contentos por esta interpretación.
Nuevamente como si fuera una sola voz y con un público con la piel de gallina, ahora con “Saturnine”, un tema que se notó a muchos les llegó a lo más profundo e incluso a otros les arrancó lágrimas.
La noche continuaba y después de la nostalgia y el odio interno, sintetizadores, un punch especial de batería y puños arriba para “Stay”; acto seguido y acompañados por las guitarras y su dulce voz, “Take Me Home”.
“STRANGE MACHINES”; sí, así con mayúsculas, pues la profecía se cumplió con una máquina y el hilo del tiempo nos regresó al pasado (como la propia letra lo dice) volando, con el tema que le dio éxito al grupo al cual pertenecía, The Gathering. Este fue un verdadero orgasmo de felicidad.
Después de sentir la euforia del tema anterior, siguieron con “Hyperdrive”. La bella cantante no paraba de brincar en el escenario tal como es su costumbre y de estar forma contagió al público.
Anneke agradece y se retira por un instante para ofrecer una sesión acústica, donde “4 Days” y “My Electricity” fueron de lo mejor de esta noche. Así, una vez más demuestra lo sencilla que es e interactúa con su público mexicano. “Locked Away”, también de su ex banda, es interpretada en una nueva versión.
Por supuesto que no podía faltar y era más que esperado por sus fans, “Hey, Okay!; y como “Witnesses” (Testigos), ofreció la última canción de este sensacional concierto.
Anneke encendió el ánimo al principio, a medio show y al final de éste. Un buen set. Grandes músicos y de gran presencia escénica; gratos recuerdos que dejó esta noche a chicos y grandes.
Y como Anneke misma dice: Hey, Okay! Why do
Leave a Reply
You must be logged in to post a comment.