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No Cumple La Banda Neoyorkina Con Lo Prometido Por Rogelio Matamoros y Adrian Muñoz |
Ante una incesante y constante oleada de comentarios a favor y en contra de la reciente y (al parecer) última gira del grupo neoyorkino Kiss, su paso por México defraudó a los fanáticos que estuvieron presentes para verlos, algunos por primera y otros por última vez.
Más de cuarenta mil personas estarían listas para verlos pero la primera duda surgió al no mirar por ningún lado las aparatosas grúas, que ya los integrantes de Mötley Crüe habían criticado por ser exactamente igual a la que ellos usarían. La respuesta nunca llegó, simplemente el prometido espectáculo nunca llegó, no había tales aparatos mecánicos.
Si se hiciera una comparación de lo que la banda ha estado presentando en esta “gira de despedida”, podemos observar que en la primera fotografía (arriba), el escenario cuenta con una estructura visual más sólida, el concepto así fue vendido desde el inicio a sus seguidores en el mundo. Hay que señalar que nunca se dijo (aunque sea obvio) que en los festivales esta producción podría ser imposible de llevar, lo cual la empresa promotora, tampoco asumió la responsabilidad de anunciarlo.
En la segunda imagen (al pie de la nota), la noche de ayer, en el Festival Domination Mx, se aprecia que el espectáculo de Kiss sería “uno más”, como las tantas veces que han pisado nuestro país.
Esto quizá podría no ser relevante y habrá fanáticos que no compartan estas observaciones y hasta las debatan. Pero cuando eres o te vendes como “la banda más caliente del mundo”, que ha llevado su concepto a ser una de las empresas más redituables y rentables en la industria de la música, esto pasa a ser un absoluto fiasco y obviamente una vil estafa.
Ahora bien, el siempre debatible punto de la calidad del audio. Kiss, se presentó en el mismo escenario donde actuaron, Hallestorm, Anna Fiori, Limp Bizkit y que tiene (o debería tener) la misma calidad que incluso el alterno, donde Slash, Avatar y Blackberry Smoke, sonaron de manera impecable, quizá entre bien y perfecto, pero Kiss, fue un fiasco, ¡sonó pésimo! Poca apreciación de las guitarras, excepto en los solos respectivos. El bajo, pasó sin mayor relevancia y la batería sonaba muy al estilo de la de Metallica, en el álbum St. Anger.
Por si todo esto fuera poco, cuando llegó el momento de interpretar “Love Gun”, en la cual Paul Stanley “vuela” en un arnés sobre la gente hasta una plataforma remota al escenario, la grúa que lo elevaría, falló y nunca pudo alcanzar la altura necesaria para asegurarse, por lo que se canceló el truquito en ese momento. Al terminar la canción, el músico se disculpó y se notaba su molestia.
Si esto se toma como un buen pretexto para traer a la banda nuevamente como únicos estelares, también se prestará a un nuevo “fraude” porque se dijo que ésta sería su última presentación en México y así se vendió la idea de su show en el Domination Fest.
Habrá que esperar. Por lo pronto, Kiss así se despidió de los mexicanos, con una muy decepcionante actuación.
En los primeros segundos del video se aprecia la falla técnica, donde se decide cancelar el truco y el show debe continuar.
