Metallica es una banda cuya influencia se ha esparcido por todo el planeta y quizá sea cierto que los homenajes posiblemente no significan gran relevancia; sin embargo cuando uno de estos tributos se anuncia con el acompañamiento de una Orquesta Sinfónica, el grado de dificultad y también la expectativa crecen exponencialmente. Tal fue el caso de este evento denominado “Metallica Sinfónico”, con el que MysticaGirls engalanó las celebraciones por su décimo aniversario, el cual con bombo y platillo anunció la colaboración de la banda mexicana y la Orquesta Filarmónica de las Artes.
Desde un principio y casi durante los más de noventa minutos que duró el recital, MysticaGirls se hizo acompañar de Alberto Hermida, integrante de Minerva, en la guitarra de acompañamiento y uno que otro solo. Con él, la banda consiguió construir un eficiente muro de sonido a base de tres guitarras, que en conjunto con la orquesta logró cimbrar los muros del Auditorio Insurgentes 98, en más de una ocasión.
Fue así que en compañía de más de treinta músicos de la OFIA, Cinthya BlackCat (voz y guitarra líder), Yolanda Moreno (batería), Kathy Whitewolf (bajo) y Bianka Roads (guitarra rítmica), obtuvieron ovaciones por parte del público que ocupó gran parte de las butacas del lugar y que desde la primer interpretación manifestó su aprobación por los arreglos que prepararon para esa noche.
De entre los temas clásicos de la legendaria banda de San Francisco, nos presentaron “For Whom The Bells Tolls”, “Seek And Destroy”, “Fuel”, “Master Of Puppets”, “Battery”, “One”, “Enter Sandman” y “Nothing Else Matters” (para la cual contaron con la participación de Mao Kanto, vocalista de S7N. Hasta se dieron tiempo para presentar un tema del repertorio de MysticaGirls, “Boogie Biker”, además de un vals que la misma Cinthya compuso para su boda y dedicó a su marido.
Como marco del concierto, también se debe de comentar lo agradable que fue disfrutar del evento en un lugar cómodo, con buen audio y luces, con bebidas y dulcería económica; sobre todo respetando la puntualidad anunciada. Pues en conjunto, esto es lo que necesita el rock para hacer que el público regrese a los lugares en los que se presentan bandas de rock y metal, para que la demanda y en consecuencia la calidad, se incrementen.
