SOLEDAD FERNÁNDEZ RINDE HOMENAJE A VAN DER WEYDEN, EN EL M. DEL PRADO

Por M. EstherBELTRÁN / Fotos de J. CarlosSANTANA

Málaga, España.- La pintora madrileña presenta la exposición, Soledad Fernández . Homenaje a Van der Weyden, una muestra en la que la artista plástica muestra su admiración por el cuadro El Descendimiento de la Cruz, del pintor Rogier Van der Weyden, obra que alberga el Museo del Prado.

Fernández explica que en su obra los personajes se presentan como si de una escena teatral se tratara. En la obra de Van der Weyden se ve a Cristo es bajado de la cruz, recibido por los brazos de José de Arimatea, Nicodemo, La Virgen María y el apóstol Juan. “Lo he trasladado a esta época y a mi circunstancia de pintora realista, pero queriendo expresar la compasión y el dolor que después de cinco siglos me transmite la obra de Van der Weyden, inspirándome en la estética del sufrimiento, cambiando el concepto religioso (el cual no se puede significar mejor que lo hizo él) por otro de fuerte contenido social”.

Asimismo, añade: que ha “deseado con esta obra y desde las tesis del maestro flamenco trasladar a nuestros días otra visión de ese drama permanente de la condición humana, como es la existencia del dolor”.

Encarnó la escena en la actualidad con un trabajador que ha caído de un andamio y con el sufrimiento humano. Estos personajes son encarnados por su hijo, su hermana, su marido o ella misma, personajes tan conocidos, cercanos y familiares para Soledad.

“Es un homenaje junto con veintisiete obras entre dibujos y bocetos preparatorios en los que se destacan rostros y primeros planos que se adentran en la tragedia y el dolor revelando el padecimiento, el sentimiento desgarrador ante un accidente laboral cotidiano, pero siempre desde la absoluta dignidad de los personajes y siendo fiel a su estilo vocacional del realismo en esta ocasión focalizado en el cuerpo humano, con la máxima sensibilidad y exigencia que entraña, y al mismo tiempo suscita”.

Esta pintora madrileña está considerada por la crítica como una de las mejores pintoras realistas del momento, siendo uno de sus temas favoritos el cuerpo humano, sobre todo el desnudo de mujer siempre envuelto en papeles o telas, lo que le da a la obra una cierta magia y misterio.

Sus obras pueden ser contempladas en los museos: Musée Quentovic (Le Touquet, Francia), National Museum of Fine Arts (La Valletta, Malta), Cathedral Museum (Medina, Malta), Museo Bayo (Puerto de Santa María, Cádiz – España), Museo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (Madrid, España) y Museo de Dibujo «Castillo de Larrós» (Huesca, España).