SARAH BRIGHTMAN: SOÑADORA REGRESA A MÉXICO

Sarah Brightman complace una vez más a sus fanáticos mexicanos con una presentación espectacular el próximo 13 de noviembre en la Arena Ciudad de México, como parte de su gira Dreamchaser.

Por Adrian MUÑOZ

La talentosa cantante de ópera, actriz y bailarina de cincuenta y tres años ofrecerá un repertorio muy amplio de su larga trayectoria musical y promoverá su más reciente material discográfico Dreamchaser.

Brightman, ofrecerá además de esta fecha, un recorrido por las principales ciudades de nuestro país como son Tampico (5 de noviembre), Monterrey (7 de noviembre), Puebla (9 de noviembre) y Guadalajara (11 de noviembre).

La británica debutó a los trece años de edad en una puesta en escena como cantante y actriz, por lo que siempre se ha desempeñado en estos dos papeles, siendo el primero, el que mayor impulso ha tenido, demostrando su hermosa y talentosa voz de soprano.

Su debut como cantante sería poco tiempo después en un grupo de pop. Su carrera se fue impulsando rápidamente y así fue llamada incluso a participar en cortos comerciales, obras musicales y su trayectoria con grupo. Su preparación fue totalmente clásica y conforme el tiempo pasaba, ella adquiría más experiencia y tonalidad en su magistral voz.

Pronto fue totalmente reconocida a nivel local y de ahí dio un brinco para presentarse en los más prestigiados teatros británicos y de Nueva York, en Estados Unidos. De esta manera además de obtener popularidad, también comenzó el reconocimiento con premios de gran importancia. Siendo aún casada, decide divorciarse al conocer durante este trayecto a Andrew Lloyd Weber, quien además de divorciarse para contraer nupcias con ella, la impulsa en el terreno teatral.

La unión que tuvo con el importante productor terminó luego de seis años, pero la amistad continuó sin mayor problema, incluso en el terreno laboral siguieron de pie, haciendo una gran mancuerna.

Su primer trabajo musical como solista, fue editado a finales de la década de los ochenta, sin embargo no tuvo el éxito esperado; sin dejarse vencer  y consciente de su talento, lanza una segunda pieza y ahí es donde esta parte de su carrera dio uno de los mayores saltos. Al poco tiempo y con el éxito encima, fue producida por Frank Peterson, del grupo Enigma, con quien tuvo un romance.

Aterrizada en los noventa se fue incrementando su carrera, grabando constantemente y logrando éxitos rotundos en sus ventas y en las presentaciones que ofrecía alrededor del mundo. Sarah Brightman se coloca como una de las máximas estrellas de la música a mediados de esta década.Disco tras disco fue trabajando con los artistas más importantes del momento y eso haría que se desempeñara también en otros ámbitos como el rock y las baladas. Además del inglés, la cantante también incursionó en el español y el alemán, grabando incluso una versión a Mecano. Más adentrado el año 2000, Brightman continua con el ascenso en su carrera y sigue interpretando composiciones que a la larga se volverían clásicos.

Lanza también ediciones especiales que incluyen conciertos, presentaciones en diferentes escenarios y escenas detrás de cámara. Para 2008 es invitada a interpretar el tema de los Juegos Olímpicos de Beijing. Sus presentaciones en diversos países alrededor del mundo incrementaron, llegando incluso a visitar distintas plazas latinoamericanas, incluso en México.Dos años después inicia una gira con orquesta sinfónica, visitando países no imaginados como Ucrania, Canadá, Macao y Corea del Sur. Su participación en los grandes festivales fue notoria y así su éxito seguiría en pie, sin dejar a un lado la parte teatral y cinematográfico.

Ahora, en 2013, como parte de su gira Dreamchaser, la grandiosa artista visita el recinto de Azcapotzalco para ofrecer un maravilloso concierto el próximo 13 de noviembre.

Los boletos están a la venta a través del Sistema Superboletos.