XXXI FTM: OTRO GRAN TEATRO DEL MUNDO, DE C. DE LA BARCA

Calderón de la Barca presente en la XXXI emisión del Festival de Teatro de Málaga a la conquista de las nuevas generaciones con Otro Gran Teatro del Mundo.

Por M. Esther BELTRÁN M.

Málaga, España.-  El XXXI Festival de Teatro de Málaga abre las puertas para que la familia se acerque al teatro con gran éxito. Se presentó la obra Otro Gran Teatro del Mundo, escrita por Calderón de la Barca y realizada en co-podrucción  con Uroc Teatro para público familiar.

La compañía Nacional de Teatro Clásico ofrece un espectáculo musical donde los niños encuentran temas divertidos y buscan fomentar la práctica de valores asociados a la convivencia: respeto, solidaridad, tolerancia y cooperación.

Sobre cómo surge la idea de tomar textos de Calderón de la Barca y adaptarlos para  niños explican que nace nuestra necesidad de adaptar el auto sacramental más famoso de la literatura universal para público familiar. “Para nuestra adaptación, los aspectos que nos interesaron del texto original fueron que el Mundo aparece como un escenario, donde a cada persona se le asigna un papel al nacer; que el Autor, que representa a la sociedad y al status quo establecido, pretende que nadie se salga de su guión; los actos tienen consecuencias morales”.

Sin embargo, en “nuestra versión ponemos en el centro del argumento una historia de amor imposible, entre una Princesa rica y un Príncipe pobre. Un Mundo enfermo asiste a esta fábula sobre la desigualdad, donde el personaje de una niña de siete años pone en cuestión la lógica absurda del mundo adulto. Hemos contado nuestra historia en clave de comedia musical, como el vehículo más apropiado para llegar a nuestros jóvenes espectadores. El espectáculo incluye canciones originales y música en directo, puesto que pensamos que una de las mejores maneras de acercar el verso con toda su sonoridad y belleza a los más pequeños es a través de la música. Por eso hemos convertido los pasajes más famosos del auto sacramental de Calderón en canciones que ayuden a entender mejor la trama, conservando la pureza del texto, aunque hayamos decidido alejarnos de los aspectos religiosos y sustituirlos por conflictos éticos”.

Por varios minutos los niños disfrutan de la historia y participan cuando el elenco se lo solicita. La producción es buena cuenta con vestuario colorido, bailes y una escenografía que capta la atención de los espectadores.

Por su calidad y su interpretación, sin duda, es un buen teatro dirigido a los niños que los tratan como seres pensantes y no hacen uso de los clásicos pastelazos para atraer y divertir a una infancia que cada día busca tener un teatro de calidad y que sea su visita una experiencia que recuerden durante su trayecto a casa y puedan comentar con sus amistades y familiares.

Sin duda está obra una una gran posibilidad para acercar a toda la familia al teatro clásico.